Chile Músicos

Versión completa: Soviéticos
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"Un mundo aparte es la novela-testimonio que Gustaw Herling-Grudziński escribió sobre los dos años que pasó en el campo de trabajo de Arkangelsk en el Gulag soviético. Pero este libro no es únicamente un testimonio del horror, sino también una obra que analiza el sufrimiento humano en clave de piedad y esperanza.
Su autor escribió esta obra en polaco entre julio de 1949 y julio de 1950, coincidiendo con una estancia en Inglaterra. En 1951 la editorial londinense Heinemann publicó la versión inglesa con un prólogo de Bertrand Russell. Era uno de los primeros testimonios del horror en los campos de trabajo soviéticos, por lo que su autor fue objeto de una auténtica caza de brujas por parte de la izquierda europea que negaba la existencia de los campos.
En 1953 apareció la primera edición en su lengua original publicada por la editorial polaca en el exilio Kultura. En Francia, ninguna editorial tuvo el valor de publicarlo a pesar de que los derechos se compraron varias veces y de que Camus recomendó el libro a varios editores, aun así el libro tardó más de treinta años en publicarse allí. En 1990 pudo por fin publicarse en Rusia y en Polonia, donde durante décadas había encabezado el índice de libros prohibidos por el régimen comunista...
«De los muchos libros que he leído sobre experiencias de las víctimas de las cárceles y campos de trabajo soviéticos, Un mundo aparte, de Gustaw Herling-Grudziński, es el más impresionante y mejor escrito. Este libro posee una extraña fuerza descriptiva, sencilla y vívida, y es absolutamente imposible dudar de su sinceridad en todos los aspectos». Bertrand Rusell, 1951
«Este libro tendría que ser publicado y leído en todos los países, tanto por lo que es como por lo que dice». Albert Camus, 1956..."

(Prólogo de Jorge Semprún a "Un mundo aparte" de Gustaw Herling-Grudziński)

[Imagen: Gustaw_Herling-Grudzinski_3.jpg]
"Aunque duraron tanto como la Unión Soviética, y aunque muchos millones de personas pasaron por ellos, la verdadera historia de los campos de concentración de la Unión Soviética todavía se desconoce...Tomé conciencia del problema por primera vez hace varios años, cuando caminaba por el puente de Carlos, una atracción turística de primer orden en la que entonces era la recientemente democrática Praga. Había músicos callejeros y prostitutas a lo largo del puente, y cada cincuenta metros más o menos alguien vendía precisamente aquello que se ha de vender en un lugar como ese, digno de una postal. Se exhibían pinturas de calles bonitas de buena factura, junto con bisutería y llaveros de Praga. Entre las curiosidades, uno podía adquirir objetos militares soviéticos: boinas, insignias, hebillas y prendedores, las imágenes de latón de Lenin y Brézhnev que los escolares soviéticos otrora solían llevar en el uniforme.
El espectáculo me causó extrañeza. La mayoría de las personas que compraban la parafernalia soviética eran estadounidenses y europeos occidentales. Se habrían sentido incómodos al pensar en llevar una esvástica. Sin embargo, ninguno tenía inconveniente en llevar la hoz y el martillo prendida en la camiseta o en la gorra. Era una observación sin importancia, pero, a veces, ese tipo de observaciones permiten percibir mejor un estado de ánimo cultural. La lección no podría haber sido más elocuente: mientras que el símbolo de un asesinato masivo nos llena de horror, el símbolo de otro asesinato masivo nos hace sonreír.
Que haya falta de sensibilidad en torno el estalinismo entre los turistas de Praga se explica parcialmente por la escasez de imágenes en la cultura popular occidental. Con la guerra fría llegaron James Bond y los thrillers, y rusos caricaturizados como los que aparecen en las películas de Rambo, pero no realizaciones tan ambiciosas como La lista de Schindler o La decisión de Sofía. Steven Spielberg, probablemente el director más prestigioso de Hollywood (nos guste o no), ha optado por realizar películas sobre los campos de concentración japoneses (El imperio del sol) y los nazis, pero no sobre los estalinistas. Estos últimos no han captado el interés de Hollywood de la misma manera.
La cultura intelectual no ha sido mucho más receptiva. La reputación del filósofo alemán Martin Heidegger se ha visto profundamente afectada por su breve y abierto apoyo al nazismo, un entusiasmo que se desarrolló antes de que Hitler hubiera cometido sus principales atrocidades. Por otra parte, la reputación del filósofo francés Jean-Paul Sartre no ha sufrido en lo más mínimo por su agresivo apoyo al estalinismo durante los años de la posguerra, cuando había pruebas abundantes de las atrocidades de Stalin al alcance de cualquier interesado. Una vez Sartre escribió que no era nuestro deber escribir sobre los campos de trabajo soviéticos; que éramos libres de permanecer alejados de las disputas sobre el carácter del sistema, siempre que no ocurriera ningún episodio de importancia sociológica. En otra ocasión, le dijo a Camus que, al igual que él, consideraba que los campos eran intolerables, pero igualmente intolerable era el uso que de ellos hacía cada día la prensa burguesa. Algunas cosas han cambiado desde el hundimiento del régimen soviético. En 2002, el novelista británico Martin Amis se sintió lo suficientemente conmovido por el tema de Stalin y el estalinismo como para dedicarle un libro. Su obra permitió que otros escritores se preguntaran por qué tan pocos miembros de la izquierda política y literaria habían mencionado el tema. Por otra parte, algunas cosas no han cambiado. Todavía es posible que un académico estadounidense publique un libro sugiriendo que las purgas de la década de 1930 fueron útiles porque promovieron cierta movilidad ascendente y, por lo tanto, pusieron los cimientos para la perestroika. Todavía es posible que un editor literario británico rechace un artículo porque es «demasiado antisoviético». Mucho más común, no obstante, es la reacción de tedio o indiferencia ante el terror estalinista. La reseña de un libro que escribí sobre las repúblicas occidentales de la antigua Unión Soviética en la década de 1990 incluía las siguientes frases: «Aquí ocurrió la aterradora hambruna de la década de 1930, en que Stalin mató más ucranianos que judíos asesinó Hitler. Sin embargo, ¿cuántos en Occidente lo recuerdan? Después de todo, la matanza fue aburrida, si no aburridísima, y evidentemente muy poco dramática». Se trata de pequeñas cosas: la compra de un objeto, la reputación de un filósofo, la presencia o ausencia en las películas de Hollywood. Pero ponedlas juntas y conformarán un relato. Intelectualmente, los estadounidenses y los europeos occidentales saben lo que ocurrió en la Unión Soviética. La aclamada novela de Aleksandr Solzhenitsin sobre la vida en los campos, Un día en la vida de Iván Denísovich, fue publicada en Occidente en varias lenguas en 1962-1963. Su relato oral de los campos, Archipiélago Gulag, suscitó muchos comentarios cuando apareció en muchas lenguas en 1973. En efecto, este libro provocó una pequeña revolución intelectual en algunos países, y muy notoriamente en Francia amplios sectores de la izquierda francesa adoptaron una postura antisoviética. Se hicieron muchas más revelaciones sobre el Gulag durante los años ochenta, los años de la Glasnost, y también recibieron la debida publicidad en el extranjero.
Sin embargo, para muchas personas los crímenes de Stalin no inspiran la misma reacción visceral que los crímenes de Hitler. Ken Livingstone, un antiguo miembro del Parlamento británico, ahora alcalde de Londres, se esforzó una vez en explicarme la diferencia. Sí, los nazis eran «malvados», dijo; pero la Unión Soviética estaba «deformada». Esta opinión refleja el sentir de muchas personas, incluso de aquellas que no son de izquierdas a la antigua usanza: la Unión Soviética, simplemente, de alguna manera se pervirtió, pero no estaba fundamentalmente equivocada, del mismo modo en que la Alemania de Hitler se equivocaba.
Hasta hace poco era posible explicar esta falta de sensibilidad general hacia la tragedia del comunismo europeo como el resultado lógico de una serie concreta de circunstancias. El paso del tiempo es una de ellas: los regímenes comunistas se volvieron menos censurables a medida que pasaban los años. Nadie temía demasiado al general Jaruzelski, ni siquiera a Brézhnev, aunque ambos fueron responsables de la devastación. La falta de información fehaciente, respaldada por la investigación de archivo, era otra circunstancia. La escasez de trabajos académicos sobre este tema se debía principalmente a la escasez de fuentes. El acceso a los emplazamientos de los campos estaba prohibido. Ninguna cámara de televisión ha filmado nunca los campos soviéticos ni a las víctimas, como se hizo en Alemania al final de la Segunda Guerra Mundial. Así pues, la carencia de imágenes significa menor comprensión.
Pero también la ideología distorsionó las formas en que comprendíamos la historia soviética y europea oriental. Un pequeño sector de la izquierda occidental luchó por explicar, y a veces disculpar, los campos y el terror que los creó a partir de 1930. En 1936, cuando millones de campesinos soviéticos trabajaban en los campos o vivían en el destierro, los socialistas británicos Sidney y Beatrice Webb publicaron un amplio texto general sobre la Unión Soviética, que explicaba, entre otras cosas, que el campesino ruso oprimido estaba adquiriendo gradualmente un sentido de la libertad política. Durante los procesos de Moscú, mientras Stalin condenaba arbitrariamente a miles de inocentes miembros del partido a los campos, el dramaturgo Bertolt Brecht le decía al filósofo Sidney Hook: «Cuanto más inocentes son, más merecen morir»..."

(Anne Applebaum. "Gulag: historia de los campos de concentración soviéticos")

[Imagen: img_art_9951_2624.jpg]
[Imagen: hipertextual-avengers-endgame-futuro-cap...=all&ssl=1]

rusia malo malo...coshino feo, asesino


anglosajones buenos, bakanes y libertadores nerd
(2022-11-27,12:53)tobiz escribió: [ -> ][Imagen: hipertextual-avengers-endgame-futuro-cap...=all&ssl=1]

rusia malo malo...coshino feo, asesino


anglosajones buenos, bakanes y libertadores nerd

Se nota que tu tratamiento con estupefacientes y parafina nasal va de lujo.
ahora tiñete el pelo a rubio camarada!

jaja


anoto el sshhhhhileno, marcelo salas! (le ganaste a inglaterra viejo!!!) xD


Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.
(2022-12-01,10:59)Tyr escribió: [ -> ]Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.


Yahhhhh que la URSS no apoyó la izquierda, es como decir que USA no apoyó las dictablandas!
¿A Fuzak ya lo habrán dejado entrar a la elite patronal gracias a su antocomunismo de facho pobre?
Agárrense a chuchas con confianza no más si en esta wea ya no hay moderadores
(2022-12-06,18:16)diaboloinmusica escribió: [ -> ]¿A Fuzak ya lo habrán dejado entrar a la elite patronal gracias a su antocomunismo de facho pobre?

Deberían darle premio al esfuerzo al menos (?)
(2022-12-06,18:16)diaboloinmusica escribió: [ -> ]¿A Fuzak ya lo habrán dejado entrar a la elite patronal gracias a su antocomunismo de facho pobre?

El poh, el cuico de Recoleta!
La inflación fue del 13,3%, oh sorpresa! se están haciendo ricos las Pymes.

Adivinen quien fue el seudo economista que dijo dicha frase, una ayudita es Ministro!

Otra ayudita, su mami fue Ministra.

Errrrrr niño estudio con Becas Chile, Dicen que se doctoro en USA pero odia el Mercado, raro.


Ya pohhh
chile no existe, es una pluma en la tormenta, estornuda USA y chile se resfria


jajajajja....cero industria real en este pais, solo produccion de divisas q se sacan cuando no hay buenos augurios en el mercado
(2022-12-01,10:59)Tyr escribió: [ -> ]Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.

La unión sovietica es la demostración empírica de cómo una sociedad socialista pudo convertir a un país de campesinos y zares en una potencia nuclear, tecnológica, deportiva e intelectual, con servicios básicos que funcionaban.

El posmodernismo trasnochado del que proviene el feminismo, lo plurinacional, lo lgtb y en general los fans de los nuevos dogmas de fe del capitalismo convierten a la izquierda en un grupo inocuo que no genera absolutamente ningún cambio más que el alza en las cuentas bancarias de los nuevos dueños del poder.

La izquierda no puede ni debe negar ni avergonzarse por la unión sovietica, debe aprender de esos errores, fustigar los horrores cometidos pero no negar los éxitos y el enorme progreso soviético durante gran parte del siglo xx.
(2022-12-07,15:44)lennoniano escribió: [ -> ]
(2022-12-01,10:59)Tyr escribió: [ -> ]Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.

La unión sovietica es la demostración empírica de cómo una sociedad socialista pudo convertir a un país de campesinos y zares en una potencia nuclear, tecnológica, deportiva e intelectual, con servicios básicos que funcionaban.

El posmodernismo trasnochado del que proviene el feminismo, lo plurinacional, lo lgtb y en general los fans de los nuevos dogmas de fe del capitalismo convierten a la izquierda en un grupo inocuo que no genera absolutamente ningún cambio más que el alza en las cuentas bancarias de los nuevos dueños del poder.

La izquierda no puede ni debe negar ni avergonzarse por la unión sovietica, debe aprender de esos errores, fustigar los horrores cometidos pero no negar los éxitos y el enorme progreso soviético durante gran parte del siglo xx.


Es un poco contradictorio tu análisis y conclusión.

Es tan equivalente, como que la derecha avalará públicamente a Pinochet pues tuvo éxito económico en su Gobierno y se olvidará de los desparecidos detenidos, torturados y un largo etc.,

Ni hablar de Hitler, etc.

Pero bueno, alguién paso por fuera de la escuela.
(2022-12-08,09:01)ce_ahumada escribió: [ -> ]Es tan equivalente, como que la derecha avalará públicamente a Pinochet pues tuvo éxito económico en su Gobierno

El éxito económico de Pinochet :


El “milagro económico” que Milton Friedman atribuyó a Pinochet es una de las más grandes falsas narrativas de la historia económica moderna. El milagro que él supervisó fue sólo una serie de ciclos de auge y depresión: dos periodos de rápido crecimiento que se precipitaron hacia dos profundas depresiones.

La primera gatilló un “tratamiento de choque” de contracción financiera, privatización y desregulación, llevada adelante en 1975 por su gabinete ministerial entrenado en la Universidad de Chicago. La segunda, una catastrófica crisis de deuda acontecida en 1982.

Como resultado inmediato de las reformas de libre mercado que se aplicaron a mediados de los 70, Chile tuvo la segunda tasa de crecimiento más baja de toda Latinoamérica: las quiebras estaban a la orden del día, el ingreso nacional cayó un 15%, el desempleo sobrepasó el 20% y los salarios se desplomaron un 35% más abajo que los niveles de 1970. Eso sin mencionar la corrupción, desde las ventas relámpago de propiedades estatales a inversionistas vinculados políticamente, hasta los millones de dólares que Pinochet reservó para sí, y que luego fueron hallados en cuentas secretas de Washington y Miami, entre otros.

El crecimiento promedio del producto interno bruto per capita fue de menos de 2% durante toda la dictadura de Pinochet, significativamente menos que los siguientes gobiernos demócratacristianos y socialistas que le sucedieron. El índice de pobreza, que se alzaba en un 40% cuando Pinochet dejó el cargo, fue reducido a la mitad dentro de una década gracias a la inversión en políticas sociales, y se sitúa en un 14% actualmente. Los números no mienten: el verdadero milagro económico chileno ocurrió después de Pinochet, bajo gobiernos democráticos de izquierda.



Parece que el que pasó por fuera de la escuela fue otro  indicacion
(2022-12-08,09:01)ce_ahumada escribió: [ -> ]
(2022-12-07,15:44)lennoniano escribió: [ -> ]
(2022-12-01,10:59)Tyr escribió: [ -> ]Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.

La unión sovietica es la demostración empírica de cómo una sociedad socialista pudo convertir a un país de campesinos y zares en una potencia nuclear, tecnológica, deportiva e intelectual, con servicios básicos que funcionaban.

El posmodernismo trasnochado del que proviene el feminismo, lo plurinacional, lo lgtb y en general los fans de los nuevos dogmas de fe del capitalismo convierten a la izquierda en un grupo inocuo que no genera absolutamente ningún cambio más que el alza en las cuentas bancarias de los nuevos dueños del poder.

La izquierda no puede ni debe negar ni avergonzarse por la unión sovietica, debe aprender de esos errores, fustigar los horrores cometidos pero no negar los éxitos y el enorme progreso soviético durante gran parte del siglo xx.


Es un poco contradictorio tu análisis y conclusión.

Es tan equivalente, como que la derecha avalará públicamente a Pinochet pues tuvo éxito económico en su Gobierno y se olvidará de los desparecidos detenidos, torturados y un largo etc.,

Ni hablar de Hitler, etc.

Pero bueno, alguién paso por fuera de la escuela.
El grueso de la derecha evalua el gobierno de pinochet como dijiste tu, no olvidar que los mismos que fueron gobierno hasta hace poco corrieron a defenderlo en Londres, hasta ahora hay idiotas hablando de "supuestos desaparecidos" en el congreso po hueon impresentable.

Dicho esto lo que me sorprende mucho es que hables de escolaridad teniendo tan poca comprensión lectora yo dije textual "debe aprender de esos errores, fustigar los horrores cometidos pero no negar los éxitos y el enorme progreso soviético durante gran parte del siglo xx".

Igual entiendo lo limitado de tu vocabulario y te explico fustigar es criticar muy duro, se entiende asi o no? Yo creo que la izquierda debe aprender de sus errores y CRITICAR con dureza sus horrores... los horrores son gente muerta y abusos, necesitas más peras y manzanas?, amigo en buena si usted no tiene la formación política ideológica e histórica para ser un aporte a la conversación deje de dar la cacha, ya es medio patético leerte sacando hueas de contexto y armando realidades paralelas.
(2022-12-08,11:04)Jorge O escribió: [ -> ]
(2022-12-08,09:01)ce_ahumada escribió: [ -> ]Es tan equivalente, como que la derecha avalará públicamente a Pinochet pues tuvo éxito económico en su Gobierno

El éxito económico de Pinochet :


El “milagro económico” que Milton Friedman atribuyó a Pinochet es una de las más grandes falsas narrativas de la historia económica moderna. El milagro que él supervisó fue sólo una serie de ciclos de auge y depresión: dos periodos de rápido crecimiento que se precipitaron hacia dos profundas depresiones.

La primera gatilló un “tratamiento de choque” de contracción financiera, privatización y desregulación, llevada adelante en 1975 por su gabinete ministerial entrenado en la Universidad de Chicago. La segunda, una catastrófica crisis de deuda acontecida en 1982.

Como resultado inmediato de las reformas de libre mercado que se aplicaron a mediados de los 70, Chile tuvo la segunda tasa de crecimiento más baja de toda Latinoamérica: las quiebras estaban a la orden del día, el ingreso nacional cayó un 15%, el desempleo sobrepasó el 20% y los salarios se desplomaron un 35% más abajo que los niveles de 1970. Eso sin mencionar la corrupción, desde las ventas relámpago de propiedades estatales a inversionistas vinculados políticamente, hasta los millones de dólares que Pinochet reservó para sí, y que luego fueron hallados en cuentas secretas de Washington y Miami, entre otros.

El crecimiento promedio del producto interno bruto per capita fue de menos de 2% durante toda la dictadura de Pinochet, significativamente menos que los siguientes gobiernos demócratacristianos y socialistas que le sucedieron. El índice de pobreza, que se alzaba en un 40% cuando Pinochet dejó el cargo, fue reducido a la mitad dentro de una década gracias a la inversión en políticas sociales, y se sitúa en un 14% actualmente. Los números no mienten: el verdadero milagro económico chileno ocurrió después de Pinochet, bajo gobiernos democráticos de izquierda.



Parece que el que pasó por fuera de la escuela fue otro  indicacion


Buajaja los números no mienten, que la hizo la hizo, pero no estoy dispuesto a defenderlo ni endiosarlo, así que chao!
(2022-12-07,15:44)lennoniano escribió: [ -> ]
(2022-12-01,10:59)Tyr escribió: [ -> ]Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.

La unión sovietica es la demostración empírica de cómo una sociedad socialista pudo convertir a un país de campesinos y zares en una potencia nuclear, tecnológica, deportiva e intelectual, con servicios básicos que funcionaban.

El posmodernismo trasnochado del que proviene el feminismo, lo plurinacional, lo lgtb y en general los fans de los nuevos dogmas de fe del capitalismo convierten a la izquierda en un grupo inocuo que no genera absolutamente ningún cambio más que el alza en las cuentas bancarias de los nuevos dueños del poder.

La izquierda no puede ni debe negar ni avergonzarse por la unión sovietica, debe aprender de esos errores, fustigar los horrores cometidos pero no negar los éxitos y el enorme progreso soviético durante gran parte del siglo xx.

Creo que no se entendió. La URSS Nunca fue TODA la izquierda. Era parte de la izquierda, por supuesto, pero jamás reunió a todo el espectro de izquierda mundial - como el otro tipo que parece que quedó pegado en Kinder entendió.

Por otro lado y como dije, Rusia ya era una potencia cuando estalló la revolución Rusa. Con un país tan grande y con tantos recursos, tomado en un momento de auge brutal comparado a nivel mundial, bastaba solamente gente competente para hacerlo surgir o consolidarlo como potencia, no necesitaban el Capital o el Manifesto Comunista necesariamente. Sin ir más lejos, nunca dejaron de ser capitalistas, en la práctica. Se integraron de todos modos al sistema de intercambio de bienes y servicios liberal.

El posmodernismo TAMPOCO es LA Izquierda. Es una consecuencia de la logica neoliberal y del indiviualismo exacerbado proveniente de las filosofias tristes existencialistas (kierkegaard, schopenhauer, nietzsche, heidegger), sumada a la tendencia degenerada y trasgresora de los existencialistas, estructuralistas y post-estructuralistas franceses que fueron sucesores de esos tristes tipos (sartre, bataille, foucault, derrida, camus, cioran, lacan, etc). Al capital le importa bien poco si sus fines son logrados por la izquierda o la derecha, total los moja a todos, como claramente nuestra patética historia "republicana" muestra.

Es Imperativo dejar atrás a la URSS si se piensa hablar de "izquierda". Vivir de esa nostalgia por un proyecto fracasado es lo que ha hecho que el marxismo mismo no haya avanzado NADA desde la muerte de Engels. El materialismo dialéctico de Lenin y la escuela Soviética no ha contribuido en nada realmente importante en este siglo. Es necesario dejar atrás el culto y las abadías de las "internacionales" para armar algo nuevo que sea representante de estos tiempos.
(2022-12-10,19:53)Tyr escribió: [ -> ]
(2022-12-07,15:44)lennoniano escribió: [ -> ]
(2022-12-01,10:59)Tyr escribió: [ -> ]Adorno, Horkheimer, Arendt, Habermas, Levinas, entre varios otros pensadores, rastrearon la metodologia y frialdad del exterminio masivo como práctica desde el capitalismo, combinado y dirigido por la idea de moral ilustrada basada en el individuo y en el deber.

Esto no puede ser más claro que el testimonio de Eichmann en Nuremberg, donde describe con total detalle y frialdad el funcionamiento del exterminio nazi. Básicamente, poner la eficiencia de recursos y objetivos adoptando los métodos fordistas de producción hacía que los involucrados, que eran solo engranajes de una maquinaria mayor, no vieran a los prisioneros como personas, sino que como insumos, materiales o piezas. Esta es la mentalidad que terminó imperando en el mundo hasta hoy en la division social del trabajo.

No olvidar que, previo a la revolución rusa de principios de siglo XX, Rusia había entrado en un proceso de industrialización fuerte, con inversión de los países más ricos economicamente en su epoca. El capitalismo ya estaba instalado y operando en Rusia previo al nacimiento de la URSS y nunca dejaron de funcionar de ese modo, a pesar que la propaganda dijera lo contrario.

Por otro lado, homologar "la izquierda" a un supuesto (de hecho falso) silencio respecto a los crimenes rusos comparados con los crimenes del fascismo es una forma muy patetica de hacer proselitismo pro derecha. El facherío jugando a un falso empate, como siempre. La URSS no es ni fue nunca LA izquierda, como representante unitario y total de una visión de mundo y de principios humanos. Es como decir que la derecha mundial es Trump o Bush. Hay que ser muy miope.

La unión sovietica es la demostración empírica de cómo una sociedad socialista pudo convertir a un país de campesinos y zares en una potencia nuclear, tecnológica, deportiva e intelectual, con servicios básicos que funcionaban.

El posmodernismo trasnochado del que proviene el feminismo, lo plurinacional, lo lgtb y en general los fans de los nuevos dogmas de fe del capitalismo convierten a la izquierda en un grupo inocuo que no genera absolutamente ningún cambio más que el alza en las cuentas bancarias de los nuevos dueños del poder.

La izquierda no puede ni debe negar ni avergonzarse por la unión sovietica, debe aprender de esos errores, fustigar los horrores cometidos pero no negar los éxitos y el enorme progreso soviético durante gran parte del siglo xx.

Creo que no se entendió. La URSS Nunca fue TODA la izquierda. Era parte de la izquierda, por supuesto, pero jamás reunió a todo el espectro de izquierda mundial - como el otro tipo que parece que quedó pegado en Kinder entendió.

Por otro lado y como dije, Rusia ya era una potencia cuando estalló la revolución Rusa. Con un país tan grande y con tantos recursos, tomado en un momento de auge brutal comparado a nivel mundial, bastaba solamente gente competente para hacerlo surgir o consolidarlo como potencia, no necesitaban el Capital o el Manifesto Comunista necesariamente. Sin ir más lejos, nunca dejaron de ser capitalistas, en la práctica. Se integraron de todos modos al sistema de intercambio de bienes y servicios liberal.

El posmodernismo TAMPOCO es LA Izquierda. Es una consecuencia de la logica neoliberal y del indiviualismo exacerbado proveniente de las filosofias tristes existencialistas (kierkegaard, schopenhauer, nietzsche, heidegger), sumada a la tendencia degenerada y trasgresora de los existencialistas, estructuralistas y post-estructuralistas franceses que fueron sucesores de esos tristes tipos (sartre, bataille, foucault, derrida, camus, cioran, lacan, etc). Al capital le importa bien poco si sus fines son logrados por la izquierda o la derecha, total los moja a todos, como claramente nuestra patética historia "republicana" muestra.

Es Imperativo dejar atrás a la URSS si se piensa hablar de "izquierda". Vivir de esa nostalgia por un proyecto fracasado es lo que ha hecho que el marxismo mismo no haya avanzado NADA desde la muerte de Engels. El materialismo dialéctico de Lenin y la escuela Soviética no ha contribuido en nada realmente importante en este siglo. Es necesario dejar atrás el culto y las abadías de las "internacionales" para armar algo nuevo que sea representante de estos tiempos.

Lo que dices parcialmente falso, la industrialización en la unión sovietica su paso a potencia tecnológica y nuclear jamás se habrían dado en otro modelo de sociedad. Viéndolo en perspectiva desde 1916 a 1989
La urrs tuvo un crecimiento de renta promedio per capita del 2,4% superior a usa (2,0%) y al mundo que promedio (1,9%). Esto no es por otra cosa que por el acelerado proceso de industrialización, de inversión tecnológica y exitoso paso de lo agrario y muchas veces hasta primitivo de algunas comunidades a lo tecnológico e industrial.

Todo lo anterior con un pésimo manejo geo político en que Moscú se metió en lugares donde jamás debió sobre cargando a niveles ridículos su aparato estatal, si unión sovietica se hubiese dedicado a sus habitantes hasta hoy sería un ejemplo de éxito socialista, y el nivel de vida de quienes originalmente habitaban Rusia sería dentro de una sociedad socialista altísimo, ahora cuando financias guerras perdidas por toda Europa, asumes el financiamiento de países quebrados a costa del erario nacional pasa lo que paso en el final de la unión sovietica en que el nivel de vida de sus propios habitantes se vio afectado.

Pretender olvidar este legado por errores y horrores cometidos para bajarse los pantalones y ser dirigidos por la horda de feministas ridículas, los aliades decontruides, lo queer, lo plurinacional y el larguísimo etc de minorías falsamente oprimidas que conforman la izquierda sistemica hoy y que olvidan la clase como elemento fundacional y determinante dentro de cualquier sociedad capitalista es el peor error posible y es además el motivo del ascenso de las derechas en sectores en que la izquierda siempre ganaba electoralmente. 

El rechazo reciente a la constitución de los payasos corporeos feministas plurinacionales disidencias y no se cuanta mierda grandilocuente mas es el retrato vivo de eso, la constitución del reino fungi no representaba a nadie más que a minorías igual que la izquierda hoy, proyectos unitarios como el de la unión sovietica con lógicas actualizaciones son LA izquierda real y olvidarse de ellos o peor aún avergonzarse de ellos es un error más de los tantos que viene cometiendo la.izquierda en lo que va de este siglo.
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